Con el paso de los días y el bloqueo de la negociación entre empresas y sindicatos de la estiba en el puerto de Valencia, cada vez están más próximas las 02:00 horas del próximo 10 de noviembre, momento en que comenzará la huelga convocada por el Comité de Empresa del Centro Portuario de Empleo de Valencia.
Diario del Puerto
Ante esta situación, hoy es un día decisivo para avanzar o bien hacia el desbloqueo de la situación y acometer un nuevo proceso negociador o, por contra, para enquistar aún más las posiciones y esperar al próximo martes al inicio de la huelga. Ambas partes se verán las caras hoy en el Tribunal de Arbitraje Laboral de la Comunitat Valenciana (TAL) y en una reunión de la Comisión Paritaria del Convenio, éste último encuentro a petición de las empresas.
Aunque la cita en el TAL es un paso preceptivo en toda convocatoria de huelga, y a pesar del fracaso cosechado en la anterior cita de arbitraje del pasado 15 de septiembre, ambas partes acuden con el objetivo de desencallar la negociación. Y es que, según fuentes sindicales y empresariales consultadas por Diario del Puerto, a lo largo de la mañana de ayer se habrían producido contactos entre el Consejo de Administración del CPE Valencia y el Comité de Empresa para conocer la respuesta empresarial a la última propuesta de los representantes de los trabajadores.
La otra cita importante tendrá lugar, en principio, a las 13:00 horas, en el marco de la Comisión Paritaria Local. Esta reunión, que tiene lugar a instancias de la parte empresarial, es la primera en la que ambas partes se encuentran tras la cita del pasado 29 de octubre, que desembocó en la presentación del preaviso de huelga.
Ayer se produjeron contactos entre ambas partes que, de momento, no habrían servido para acercar posturas
Ahora mismo, y según las fuentes consultadas por Diario del Puerto, ambas partes se cruzan acusaciones sobre los motivos por los que se ha llegado a esta situación. Las empresas acusan a los sindicatos de la estiba de dinamitar la negociación con la presentación del preaviso de huelga y de “coartar la libertad y el derecho que tienen las empresas a organizar la formación de sus trabajadores”, así como de “hacerse con competencias como son la planificación, organización, coordinación, control y seguimiento de las tareas portuarias que son exclusivas de las empresas”.
Reuniones sin resultados
Por contra, fuentes del Comité de Empresa aseguran que ha sido la paralización de todos los procesos formativos realizada por el CPE Valencia lo que ha desencadenado la presentación del calendario de movilizaciones, una situación que estas fuentes advierten “podría poner en peligro la contratación de personal para los próximos meses”.
Abastecimiento “garantizado”
Con una situación de incertidumbre sanitaria cada vez mayor y con la hipótesis cada vez más plausible de un nuevo confinamiento a nivel nacional, el colectivo estibador ha querido dejar claro que, a pesar de la convocatoria de huelga, “el abastecimiento de la población estaría totalmente garantizado”. Aunque la normativa actual es muy estricta acerca del tipo de carga que no se vería afectadas por estas movilizaciones, como es el caso de los productos perecederos o las mercancías peligrosas, lo cierto es que el colectivo estibador “mantendrá su compromiso con el abastecimiento del resto de la ciudadanía” en una “situación tan complicada”, han asegurado a este Diario.
Las últimas reuniones cara a cara entre empresas y trabajadores han finalizado sin acuerdo, lo que evidencia la falta de capacidad de ambas partes por lograr un consenso que beneficie a la comunidad portuaria valenciana. El acto de mediación en el TAL de septiembre no logró acercar posiciones. Además, la pasada semana, ambas partes se citaron de nuevo. En este caso, el CPE Valencia realizó un análisis positivo del encuentro, asegurando que ambas partes se habían emplazado a intercambiarse propuestas. La visión sindical, por contra, no fue tan optimista, y desembocó en la presentación del preaviso de huelga.
Un conflicto que viene de lejos
El conflicto de la estiba en el puerto de Valencia viene de lejos. No es algo que se haya fraguado en las últimas semanas. El 31 de octubre de 2019, el CPEV presentó el sistema NAVIS N4 al Comité de Empresa y anunció la intención de CSP Iberian Valencia Terminal y APM Terminals Valencia de implantarlo e iniciar el Plan de Formación.
En diciembre, el CPE Valencia avisaba del incumplimiento de los plazos para la formación de monitores. Unos días más tarde, la Comisión Paritaria anunciaba que la formación comenzaría el 13 de enero de 2020. Sin embargo, ese mismo día, el Comité de Empresa solicitó que se suspendiera la formación.
Un mes después, el órgano sindical solicitó el mantenimiento de los puestos de trabajo, algo a lo que las empresas se comprometen a cumplir.
El Covid-19 dejó en suspenso el conflicto, con la cancelación de todas las acciones formativas. El 19 de junio, las empresas presentaron un nuevo proyecto de formación e-learning, fijando la fecha del 27 de julio para el inicio de la formación. El 5 de agosto la Comisión Paritaria Local abordó el conflicto. El 1 de septiembre, la Comisión Paritaria Sectorial analizó la situación y confirmó la interposición de una demanda de conflicto colectivo ante el Tribunal de Arbitraje Laboral. El 15 de octubre se produjo el acto de conciliación, que finalizó sin acuerdo.
La reunión del pasado jueves entre empresas y sindicatos terminó con las partes enfrentadas y los sindicatos presentaron el preaviso de huelga.